deleitarse, regocijo

22 febrero, 2008

LO QUE NARRÓ UN RATÓN EN EL CIELO

(Cuento)

Sí, lo que oye, en vez de matarme ó tirarme a los gatos, me cuidó con cariño.
Yo corría por ahí, en una estancia de una vieja y destartalada casa adjunta a una iglesia, en un minúsculo pueblo de Alicante, donde él moraba. Él me vio y quiso atraparme, yo me enfrenté a él, pero, el insistió cubriéndome con una sábana ó algo parecido, me atrapó, pero, me trató con suavidad, me dió a beber leche con la punta de su dedo y me colocó en una caja dispuesta para mí, me cubría con otra ropa y me daba alimento. Cada mañana, me visitaba encontrándome yo bajo esa ropa con la que me cubrió y me hacía cosquillas en la tripa, con su gran dedo. Un día, se le olvidó darme la leche y se marchó con prisa, cuando regresó, yo había desaparecido, no me encontró y sintió un vacío e impotencia. Pensó en cómo podría haber desaparecido; "¿se lo habrá llevado el gato que se esconde en el piso de arriba?, ¿habrá huido de él, al notar su presencia?, ¿ó se habrá enfadado porque olvidé visitarle y darle su comida hoy?". Como no podía ser de otra manera, él fue olvidándose de mí y de la relación tan bonita que tuvimos.
Por esto, Señor, te pido que le protejas lo más posible de su propia especie, esta que es tan cruel con las demás especies como con la suya propia y te pido que le guardes un sitio de Rey, junto a mí ó cerca de mí, de su perro y de los demás animales que cuidó ó intentó cuidar con más ó menos suerte.

El ratoncito de la vieja casa del cura.

--
Original de;
Juancarlos G. E. (Valencia, España)
 

No hay comentarios: